En los ultimos años las compañias electricas y de gas, van acumulando más y más deficit tarifario, provocado por la nefasta politica económica de gestión del estado español. Las compañias generadoras de energía, han demandado al estado en el tribunal supremo, que le ha dado la razón, pero en parte, por lo que el deficit seguira subiendo con lo que ello supondra a nuestros bolsillos en el futuro.
Una nueva normativa, que le han colocado a las compañias por decreto, les obliga a compar carbón nacional, para así, (segun el estado), asegurarse el sumistro de carbón. Esto obliga a comprar una materia prima generadora de energía más cara, menos eficiente y más contaminante que el de la competencia, pretendiendo a su vez mantener el sector de la mineria española, a costa de todos los españoles, pues el propio tribunal supremo reconoce, "la administración pretende mantener operativa la industria nacional de carbón". Ante está situación, se ha presentado la pertinente dedanda ante el tribunal de Luxemburgo, que provisionalmente ha dictado una resolución de que la compra obligada por las compañias energéticas de carbón nacional, sea hasta el 2012.
REFLESIONES FINALES;
El sector minero está abocaco a su desaparición en España, a pesar de los esfuerzos realizados. Se produce un carbón que en comparación a los de la competencia, es mucho más caro, su quema produce altos niveles de contaminación siendo del todo poco eficiente, por lo que tiene los dias contados, dentro de un mercado libre, como es lo que exige el mercado de la comunidad europea. Se puede aplicar un sentido darwinista dentro de la económia, pues los mejor adaptados al mercado son los que sobreviviran.
Con las trabas a la energía nuclear, la subención de las energias renobables, y ahora el mantenimiento forzado del carbón nacional, supone que el deficit tarifario continue multiplicandose, hasta niveles insospechados de deuda, teniendo está deuda que ser liquidada algun día.
Se crea a su vez un peligroso proteccionismo por parte del estado hacía el carbón nacional, que va en contra de lo que dispone la comunidad europea.
El tribunal constitucional establece lo siguiente, "debe prevalecer el interes público, pero se deberan cuantificar convenientemente los posibles perjuicios a terceros y tendran que ser resarcidos en su totalidad, con la exigencia de responsabilidades patrimoniales al estado".
La pregunta es obligada, ¿es acaso el sector minero, de vital importancia pública?. Y si no lo es, no sera claramente un gasto público inproductivo.
La deuda del sector energetico hace 10 años, era de unos 375 millones de euros, una insignificancia a la actual de unos 7.000 millones de euros y va increchendo. Esto ha generado la necesidad de tener que titulizar la deuda de las electricas, (sacar al mercado de deuda, la deuda electrica, siendo el principal avalista el estado español, osea todos los españoles presentes y los que nazcan en proximas generaciones).
La deuda se mueve en el tiempo y con ella su cuantía total, que aumentara irremediablemente, cuyos avalistas somos nosotros. Yo pagare..., tu ..., el..., nosotros..., vosotros..., y tus hijos.
Cuando duermo solo pido que todo esto sea un juego, un sueño.
Una nueva normativa, que le han colocado a las compañias por decreto, les obliga a compar carbón nacional, para así, (segun el estado), asegurarse el sumistro de carbón. Esto obliga a comprar una materia prima generadora de energía más cara, menos eficiente y más contaminante que el de la competencia, pretendiendo a su vez mantener el sector de la mineria española, a costa de todos los españoles, pues el propio tribunal supremo reconoce, "la administración pretende mantener operativa la industria nacional de carbón". Ante está situación, se ha presentado la pertinente dedanda ante el tribunal de Luxemburgo, que provisionalmente ha dictado una resolución de que la compra obligada por las compañias energéticas de carbón nacional, sea hasta el 2012.
REFLESIONES FINALES;
El sector minero está abocaco a su desaparición en España, a pesar de los esfuerzos realizados. Se produce un carbón que en comparación a los de la competencia, es mucho más caro, su quema produce altos niveles de contaminación siendo del todo poco eficiente, por lo que tiene los dias contados, dentro de un mercado libre, como es lo que exige el mercado de la comunidad europea. Se puede aplicar un sentido darwinista dentro de la económia, pues los mejor adaptados al mercado son los que sobreviviran.
Con las trabas a la energía nuclear, la subención de las energias renobables, y ahora el mantenimiento forzado del carbón nacional, supone que el deficit tarifario continue multiplicandose, hasta niveles insospechados de deuda, teniendo está deuda que ser liquidada algun día.
Se crea a su vez un peligroso proteccionismo por parte del estado hacía el carbón nacional, que va en contra de lo que dispone la comunidad europea.
El tribunal constitucional establece lo siguiente, "debe prevalecer el interes público, pero se deberan cuantificar convenientemente los posibles perjuicios a terceros y tendran que ser resarcidos en su totalidad, con la exigencia de responsabilidades patrimoniales al estado".
La pregunta es obligada, ¿es acaso el sector minero, de vital importancia pública?. Y si no lo es, no sera claramente un gasto público inproductivo.
La deuda del sector energetico hace 10 años, era de unos 375 millones de euros, una insignificancia a la actual de unos 7.000 millones de euros y va increchendo. Esto ha generado la necesidad de tener que titulizar la deuda de las electricas, (sacar al mercado de deuda, la deuda electrica, siendo el principal avalista el estado español, osea todos los españoles presentes y los que nazcan en proximas generaciones).
La deuda se mueve en el tiempo y con ella su cuantía total, que aumentara irremediablemente, cuyos avalistas somos nosotros. Yo pagare..., tu ..., el..., nosotros..., vosotros..., y tus hijos.
Cuando duermo solo pido que todo esto sea un juego, un sueño.
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